Sociocracia y holocracia, Gobernanza para otro mundo posible
Por Mauge Cañada
La palabra Gobernanza puede alejarnos de la esencia del concepto que la habita… por falta de costumbre. Sin embargo es una palabra que alude al núcleo mismo de lo Social. Cómo nos gobernamos, cómo gestionamos el poder que nos corresponde tener para gestionar nuestra vida, con quién y cómo lo compartimos; ¿o lo cedemos a otros? Y por qué, si es que lo hacemos así.
Acaso hay una reflexión consciente, o simplemente nos colocamos en la posición habitual de «es así y ya está”. La vida es así, el mundo del trabajo es así, la empresa es así, los grupos son así… Como si habláramos de hechos incuestionables de la misma naturaleza de “el sol se levanta cada día”…
Amanece cada día. El poder necesita reflejarse en lo que crea, en lo que nutre. Las personas podemos elegir.
Lo que la Sociocracia empieza a revelar, llegada desde el mundo de la empresa, apenas conocida, casi una extraña en el lenguaje y en el imaginario colectivo; es una posibilidad, una puerta que se abre hacia un espacio más amplio… hay alternativa a la Democracia, hay otra forma de afinarse colectivamente, otros caminos por recorrer… si queremos ir más allá de lo conocido, si queremos poner la energía en el potencial creativo de las personas, y de lo que somos capaces juntas. La comunidad.
Personas que nos sentimos convocadas a imaginar nuevas herramientas para las eternas necesidades de siempre. Que nos auto invitamos a la aventura de construir sociedades más libres y capaces. Que no queremos dilapidar la energía colectiva en la multitud de miserias interpersonales que somos capaces de volcar en el espacio común.
Estamos en una sociedad cuya cultura de lo colectivo está apenas enunciada. Tras años de individualismo salvaje, ahora, en las horas de dificultad, nos volvemos a encontrar necesitadas de un espacio cálido y colaborativo para sobrevivir… para vivir… y recrear un mundo a la medida de las personas. Economía real, economía del bien común… Trueque, intercambio, bancos del tiempo. En el espacio colectivo empiezan a aparecer las semillas, crecen poco a poco , con el cuidado de aquellas personas que, a veces soñadoras, a veces visionarias, se implican con anhelo y alegría, en la búsqueda de concreción, materializar el “cómo” vamos a restaurar un mundo de dignidad y equilibrio para todas.
La Sociocracia se sitúa en la necesidad de herramientas colectivas válidas. Explora sin complejos el papel de los liderazgos, propone un consenso ligero y creativo por consentimiento, aporta elementos de gran calado en la inteligencia de una organización a través de las elecciones sin candidatos, aclara las funciones de la estructura, e invita a una apertura diferente a las personas y a las organizaciones.
Con cuatro elementos base, a veces puede parecer excesivamente simple, y sin embargo, en su aplicación, la energía de un grupo cambia de forma instantánea. Ya sea una ONG, una empresa, una cooperativa; la transformación es real y constatable.
La Inteligencia Colectiva es un término que si bien ambiguo, expresa la certeza de que la comunidad es un espacio real y eficiente. Comunidad es sencillamente el espacio compartido. En comunidad vivimos todas, seamos conscientes o no. Y en este espacio necesitamos tomar decisiones, comunicarnos, llegar a acuerdos, gestionar los desacuerdos y conflictos, distribuir y cuidar de que todas las personas dispongan del acceso a los recursos compartidos.
Hay formas Inteligentes de seguir estos procesos, y formas muy costosas. En el presente nuestras estructuras son más pesadas de lo que podemos sostener, y la economía es un simple reflejo. Una comunidad Inteligente no gasta tantos recursos en la gestión de sus necesidades comunes. No aleja tanto a la gente de las decisiones que toma sobre la vida de las personas. No permite que las personas se des-responsabilicen de sus vidas. Una empresa inteligente va en busca de la cooperación entre sus miembros, un grupo inteligente no necesita horas y más horas de asamblea para tomar decisiones relevantes o irrelevantes. Es más, sabe diferenciarlas.
Esa Inteligencia Colectiva no baja del cielo, no ocurre simplemente por reunirnos. Necesita formas que sepan contenerla, procesos que sepan cuidarla, y una estructura donde se pueda quedar a vivir. La sociocracia puede ser una forma de crear una estructura habitable para esta Inteligencia Colectiva.
¿Cómo lo hace? Pues a través de varias vías. Una es concretando los diferentes flujos de una organización. El fluir de la información y la comunicación, El movimiento hacia la acción, la ejecución de objetivos. El Círculo como espacio del poder y las decisiones. Van en armonía, pero no se confunden. Rutas expresamente diferentes. El consenso por consentimiento aligera el espacio del acuerdo. No necesitamos estar de acuerdo, ni tampoco reprimir las discrepancias, sino que las convocamos a ser transformadas en información para formar parte del proceso enriqueciendo la propuesta inicial. El consentimiento busca el momento 0 objeciones como una expresión de que el recorrido de la propuesta ha recogido ya todo el potencial del círculo. El doble enlace expresa la legitimidad estructurada del movimiento de la información de abajo-arriba ( y no solo de arriba abajo) así como el reparto real del poder, ya que la elección del doble enlace se hace por las personas del círculo correspondiente, dejando la jerarquización para una estructuración de funciones en la organización que sea útil, y no como expresión de acumulación de poder arriba en detrimento de quienes están abajo. Y finalmente la herramienta que mejor expresa la inteligencia colectiva son las elecciones sin candidatos. Las personas no se proponen a si mismas para un puesto, es responsabilidad del circulo elegir por consentimiento quien cree que es la persona mas adecuada para una función. Es un hermoso proceso que pone de manifiesto los talentos y competencias de los miembros, los criterios relevantes en ese momento para la función X en la organización, y el proceso de acordar juntas, con la libertad de las personas elegidas para aceptar o rehusar la propuesta. En las elecciones se concentra la máxima transparencia e inteligencia de un grupo. Y de momento lo tengo comprobado, el grupo no se equivoca al elegir.
Para terminar, solo comentar que sociocracia, holocracia, gobernanza dinámica y gobernanza integral son lo mismo… con afinaciones muy sutiles… incluso la holacracia, solo que este caso el término está patentado y es propiedad de una persona.
Qué es la facilitación
La facilitación es el arte de hacer las cosas fáciles. Para esto es necesario incorporar a una persona o equipo facilitador que apoye a los grupos a ser más conscientes en cada momento.
Desde el equipo de la facilitación cuidamos tres aspectos básicos en los grupos…